miércoles, 28 de febrero de 2018

Las amigas

                                                Las  amigas


           La palabra amistad, como tantas otras, viene del latín " amicitia", afecto puro, desinteresado y recíproco. Es un concepto muy distinto según la valoración de cada uno, e incluso de la edad en que conocemos  a la amiga. Tengo amigas del colegio, del instituto, de la universidad, de las clases de gimnasia, de mi profesión de enseñante, de ser las esposas de amigos de mi marido...etc.
           Buscando dichos o frases sobre la amistad me he encontrado con algunos en los que coincido  y otros con los que no. Por ejemplo: "la risa es esencial para una buena amistad", desde luego que sí. Cuando nos reunimos a tomar café un pequeño grupo de antiguas profesoras del instituto  nos reímos con ganas contándonos las cosas graciosas que nos han pasado y procurando olvidar nuestros problema. Por el contrario, eso que se dice de que "los amigos son la familia que se escoge" no lo creo mucho. Hay una parte que corresponde al azar, alguien que se cruza en tu camino. No recuerdo haber escogido a mis amigas. ¿ Fueron las circunstancias? ¿la afinidad de caracteres? No sé, espero que alguna amiga me lo aclare.
           Muchos son los filósofos, científicos y escritores que se han interesado por este tema desde la antigüedad hasta hoy. ¡Qué sabio Confucio ¡ para el que la amistad  no dependía del espacio y el tiempo. Un buen ejemplo es el del reencuentro con mi amiga de la universidad Mari Toñi. Vivo en Lorca y a raíz de los terremotos de mayo de 2011 me buscó sin tener ni mi teléfono ni mi dirección cuando supo por los medio de comunicación que habían muerto 9 personas. Después de más de 40 años encontró en el listín de teléfonos el número de mi hijo Juan que habiendo abreviado el apellido de su padre aparecía el mío. Desde entonces mantenemos una comunicación casi diaria por internet. Ella me animó a escribir en un blog. Con alguna frecuencia nos reunimos a comer en Murcia, donde vive, con otras compañeras. Aquí me vienen a la memoria las palabras de Ruyard Kipling " no hay mayor placer que el de encontrar un viejo amigo, salvo el de hacer uno nuevo", pero me gusta más el dicho latino "verus amicus nunquam amici oblisviscitur". Para los que hayáis olvidado el latín  o para los que nunca lo estudiasteis quiere decir que "el verdadero amigo no se olvida jamás del amigo". Pero alguno debió salirle "rana" a Confucio cuando afirmaba que "el silencio es un verdadero amigo, que nunca traiciona"
             De los filósofos griegos  Aristóteles en su "Ética a Nicómaco" opinaba que la amistad " es lo  más necesario para una vida feliz". En términos parecidos habla Platón del concepto de amistad de Sócrates en el diálogo "Lisis".
              En el mundo romano Cicerón escribió "De amicitia" en un diálogo conocido como "Laelius" que asegura que la única amistad posible es entre iguales y pondera la importancia de la misma para la felicidad humana.
             Leyendo las "Lecciones de ética " vemos que para Kant la amistad moral exige una confianza absoluta de tal manera que  "dos personas deberán compartir no solo sus puntos de vista sino también sus juicios secretos" y añade  que " tal dispositivo de virtudes resulta escaso, raro ".
             Laín Entralgo en la Revista de Occidente de  1972 define la amistad como "la donación de una parte de la propia intimidad".
               Merecería un estudio aparte las parejas de amigos en la literatura. Yo señalaría dos, Aquiles y Patroclo, D. Quijote y Sancho. Aquiles llora la muerte de Patroclo y Sancho la de D. Quijote.
              También han escrito sobre la amistad Albert Camús, Borges, Alberto Moravia, Ralph Waldo Emerson  y tantos otros que sería largo enumerar. Hay quien habla de la gran Amistad con mayúscula señalando que es rara, única y solo se da una vez en la vida, "tu alma gemela". Yo fui muy afortunada al disfrutar de este tipo de Amistad con mi hermana menor, ya desaparecida, Pili. Teníamos los mismos gustos, a mi me interesaba la historia aún habiéndome licenciado en literatura, y a ella le gustaba la literatura aún habiéndose licenciado en historia. Hicimos viajes juntas y nos divertíamos con cualquier cosa, nos encantaban los museos  y desayunar en las cafeterías de la plaza Belluga contemplando la fachada de la catedral. Vuelvo al latín "verus amicus est tanquam alter ídem" (un verdadero amigo es como un otro yo).
           Tan importante es la relación de amistad que la Asamblea General de la Naciones Unidas ha declarado un Día Internacional de la Amistad, el 30 de julio.    

sábado, 17 de febrero de 2018

Escapada a Londres (Modigliani)

                                           


                                        Escapada a Londres para ver la Exposición de Modigliani

           Mi hija Carmen ( a la que le encanta Amedeo Modigliani) y yo hicimos una breve escapada al Tate Museum moderno de Londres  para ver la exposición temporal de este artista, los días  10, 11, y 12 de febrero de 2018. Había obras traídas de varios lugares del mundo, algunas de colecciones particulares difíciles de contemplar.
           Aunque nacido en Livorno (Italia) Modigliani sabía que solo en un lugar  podía desarrollar su carrera, París, y allí se dirigió a los 20 años (1906). De familia de judíos sefarditas, sufrió el antisemitismo de la época. Vivió  la bohemia de Montmartre junto a otros artistas como Picasso (del que se exhibe un retrato con cierto tono de caricatura que puede delatar la mala relación que hubo entre ellos al competir como primera figura del mundo del arte). Es la época en que se inicia en los desnudos femeninos. Después se trasladó a Montparnase (1909).
           De 1911  a  1913 se dedicó casi exclusivamente a la escultura para lo cual hacía primero el dibujo, tal y como vimos en sus cariátides, las clásicas figuras femeninas que con los brazos en alto sirven como soportes arquitectónicos. Las caras recuerdan las máscaras del arte africano, influido por su amigo Paul Guillaume promotor de arte africano. A la exposición se han traído siete cabezas en piedra en las que se aprecian las características que dominarán en sus retratos femeninos: alargamiento de los cuellos, de influencia egipcia (recordemos a Nefertiti), formas curvilíneas, ojos ovalados, almendrados, casi japoneses y , a veces, cerrados.
           De los retratos realizados a sus amigos artistas, poetas, músicos y escritores, yo destacaría el de la escritora y editora Beatrice Hastings, su amante desde 1914 a 1915, con el título de Madam Pompadour, y el que titula "Mujer española" que tiene los rasgos de Concha Piquer. En 1916 reanuda los desnudos femeninos con modelos a las que pagaba 5 francos la hora por posar, el doble que una trabajadora de una fábrica. El cuadro "Desnudo sentado en un diván ( La bella mujer romana)" de 1917  se ha convertido en el icono de la exposición  y aparece en la mayoría de los souvenirs. Algunas de estas modelos imitaban a las actrices cinematográficas que tan famosas se hacían durante la Primera Guerra Mundial. Estos desnudos se consideraron en su tiempo indecentes por mostrar el vello púbico, pues tradicionalmente los desnudos se pintaban exentos de vello.
        En cuanto a los retratos masculinos resulta muy original el pintado por ambos lados: en uno "El violinista", en el otro el escultor Constantin Bracusi, ambos jóvenes, con barba y ojos entornados, dominando el color azul. Muy interesante resulta el pequeño autorretrato como Pierrot, el personaje de la comedia dell'arte italiano.
        En los últimos meses de la Primera Guerra Mundial se instala en Niza como muchos de sus amigos pintores, incluso su nueva amante, la pintora Jeanne Hébuterne, quizá el rostro más repetido. En ausencia de modelos profesionales pintó niños, algunos de los cuales se muestran en esta exposición, como el chico del sombrero y el chico en pantalones cortos, donde vemos la influencia de los colores mediterráneos.
          La tuberculosis lo mató a los 35 años cuando sus cuadros empezaban a cotizarse. A los pocos días Jeanne, embarazada, se suicidó. El éxito le vino después de su muerte, llegando a subastarse en 2015 un cuadro por 150 millones de dólares.

viernes, 2 de febrero de 2018

El epíteto épico

                                                        El epíteto épico

                 Leyendo "Una columna de fuego" de Ken Follet me he encontrado con el personaje del duque Francisco  el Acuchillado, así llamado por haber recibido en la cara una herida  combatiendo contra  un cuerpo de alemanes aliados con los hugonotes (nombre que recibieron los protestantes franceses). Entonces recordé la importancia del epíteto épico, apelativo que alterna con el nombre del personaje o lo acompaña. Es un sintagma que suele ir detrás, y que se puede referir a personas, divinidades, personajes históricos, reyes, santos, guerreros o héroes. Como adjetivo o participio su finalidad no es especificar sino caracterizar al nombre. El epíteto épico empezó siendo una fórmula propia de la literatura griega épica a través de la cual se iba recordando al lector de forma reiterada cualidades definitorias de personajes, e incluso de ciudades. Los abundantes epítetos de la Ilíada y la Odisea demuestran el influjo de la tradición oral, que utilizaba la repetición continua de muchos segmentos como un recurso nemotécnico. En general el epíteto épico se emplea también para producir un efecto estético convirtiéndose en una figura retórica. Frecuentemente en la poesía arcaica griega se empleaban más para los hombres en la épica y para la mujeres en la lírica.
                        Ejemplos:
                        Ulises, el ingenioso, el fecundo en ardides.
                        Afrodita, amante de la risa.
                        Agamenón, el que tiene ojos de perro y corazón de ciervo, domador de caballos.
                        Andrómaca, la de níveos brazos.
                        Apolo, el que hiere de lejos, el más fuerte de todos los dioses, el del argénteo arco.
                        Los aqueos, de hermosas grebas.
                        Aquiles, el de los pies ligeros,
                        Atenea, protectora de la ciudad,
                        Aurora, la de rosados dedos.
                        Briseida, la de hermosas mejillas.
                        Héctor, el de tremolante casco.
                        Patroclo, de corazón valiente.
                        Poseidón, que ciñe y bate la tierra.
                        Tetis, la de argénteos pies, la de largo peplo.
                        Zeus, el de las sombrías nubes.
                        Las troyanas, de profundo seno.
                        Hera, de ojos de novilla, de grandes ojos.
         El epíteto "de largas alas" es uno de los más empleados, llegando a ser imitado de la épica por los líricos. Ejemplo: Hermes, el de las sandalias aladas. Pero el que se repite  con más frecuencia es el relacionado con el cabello en especial el rubio.
                          ,Ejemplos:
                           Los aqueos, de larga cabellera.
                           Atenea, de hermosa cabellera.
                           Elena, de largo pelo.
                           Tetis, de hermosas trenzas.
         Hesíodo en su "Teogonía" llama a Dionisio, el de aurea cabellera. Aunque el epíteto épico de los cabellos dorados es mayoritariamente aplicado a las mujeres como a Elena, cuyos cabellos rubios eran llamativos dentro de la cultura mediterránea, para Homero son rubios todos los aqueos. También en la lírica arcaica es uno de los atributos más  señalados. Rubios eran Atenea, Eros, Apolo, Artemisa, Afrodita, Casandra, Patroclo, Aquiles, Áyax, Penélope, Telémaco, la esclava Briseida, todos los argonautas...etc. El simbolismo del color rubio es debido a que era propio de dioses y héroes, privilegio que venía del color solar y del trigo. Pero no todos los protagonistas eran rubios. Héctor es moreno. Y no solo el color del cabello eran prueba de ascendencia divina, sino también la piel blanca y los ojos claros. La palabra "iris" referida a la parte de color del ojo es griega y hace pensar en ojos azules, verdes y grises. Los primitivos invasores que llegaron a Grecia eran del norte y de Centroeuropa y se convirtieron en la clase dominante.
          El epíteto épico continuó en los Cantares de Gesta medievales, extensa literatura que narra las hazañas de un héroe que representa las virtudes de un pueblo y que los juglares recitaban de memoria.
           Ejemplos:
           El Cid, el de la larga barba, el que en buena hora nació, el que  en buena hora ciñó espada.
           Doña Jimena, la mujer honrada.
           Martín Antolínez, el burgalés de pro.
           Alvar Fáñez, el del diestro brazo.
 Y llega al renacimiento  con D. Quijote, el ingenioso hidalgo, el caballero de la triste figura.